Agosto. Dos mil once. Colorado. Limpiando la casa de Colorado me encuentro con los pequeños monstruos abandonados del Antoco.
En el taller, el hombre amarillo
Un guardia de polvo y silicona en la alfombra
Una mano
Monstruos en el pasto
Uno azul
Murcielago y calabaza en el subsuelo
Y un diablo en la escalera